lunes, 21 de abril de 2014

Museo pedagógico de la facultad de la UAM

Hemos asistido a una charla con Jesús Asensi, antiguo profesor de la UAM.
Nos ha enseñado el pequeño museo que ha montado con material que él tenía guardado y material que ha ido consiguiendo a lo largo de los años mediante donaciones recibidas o compras.
 
 
 
Primero nos ha explicado un poco en qué consiste su museo, cuál es el objetivo de haberlo montado y porqué lo ha montado ahí.
Jesús, como he dicho, ha ido recopilando material escolar antiguo desde hace muchos años, bien por donaciones que le han hecho o bien porque los ha comprado. El museo lo ha montado para compartir todo ese material del que dispone con la gente. Por ello, pidió permiso a la universidad para que le otorgara un espacio en el que poder montar su pequeño museo y así podérselo enseñar a la gente mientras explicaba las cosas.
 
Nos ha sacado libros muy antiguos de principios del s. XX e, incluso, uno de ellos de finales del s. XIX. Los libros, para la antigüedad que tienen, estaban en muy buen estado.
 
 
 
Hemos visto cartillas de bebe, pequeñas libretas muy sencillas en la que enseñan las letras del abecedario con dibujos de objetos con la inicial de cada letra.
 
 
 
 
 
 
Después nos ha sacado libros de la época de Franco. Son libros de grado preparatorio (lo que correspondería a los primeros cursos de primaria del actual sistema educativo), en los que se abarcaban varias materias: religión, lengua, matemáticas, ciencias, etc. También se podía observar que había hojas dedicadas a enseñar a los niños cómo ser un buen español, qué debía hacer la mujer y el hombre, quién era el máximo representante de España, cuál era el himno a la bandera, etc.
 

Materias:
- Matemáticas

-Historia
 
- Religión
 

- Formación política



- Lengua y lectura




Como podemos observar, son libros completos pero poco objetivos, ya que obligaba al alumno a aprender sólo lo que estaba impuesto en esos años de dictadura.
 
También nos explicó el método de escritura de antes, que era con pluma y tinta.
Primero eran plumas muy sencillas, a las que se les ponía la puntera a unos palos. Más adelante, fueron evolucionando y ya eran plumas completas, las cuáles era más difícil que se rompieran. Los tinteros eran frascos pequeños llenos de tinta, en los que los alumnos mojaban sus pumas para poder escribir.
Este método de escritura tenía muchos inconvenientes:
- Al tener que mojar la pluma en la tinta constantemente, hacía perder mucho tiempo al alumno y era más fácil que se perdieran a la hora de tomar apuntes.
- Caían gotas de tinta de la pluma, lo que ensuciaban los trabajos y esto obligaba a que el alumno tuviera que repetir los trabajos bastantes veces.
- La escritura era irregular, puesto que cuando mojaban la pluma en tinta, el trazo era grueso y marcado y, a medida que se iba acabando la tinta de la pluma, el trazo era fino y poco marcado, quedando muchas veces las palabras escritas a trozos, lo que obligaba a repasar lo ya escrito.
Más adelante llegó el bolígrafo, lo que facilitó la escritura considerablemente.
 
Hemos tenido la oportunidad de ver una pluma y un tintero y de poder escribir con ellos.
 
 
¿CÓMO APLICARLO A LA EDUCACIÓN PRIMARIA?
Enseñarle a los alumnos el material que se utilizaba antes en las escuelas es enriquecerles en conocimientos y despertar su curiosidad, ya que son materiales que la gran mayoría, por no decir todos, seguramente no  hayan visto nunca y no sepan de su existencia.
Es importante ir explicándoles la utilidad de los materiales que vamos sacando para enseñárselo, ya que así no se perderán. Además es importante hacerlo de una forma amena y divertida puesto que la capacidad de concentración de los niños pequeños es poca y corta.
Hay que hacerles partícipes de la exposición preguntándoles cosas fáciles y sencillas, porque esto les anima a querer atender y participar. También hay que hacer pequeñas actividades a lo largo de la exposición, puesto que de esta forma conseguiremos que lo tomen como un juego y fomentaremos su interés y atención.
Después de la exposición se puede hacer una asamblea y hacer una lluvia de ideas de cosas que han aprendido en la exposición, qué les ha parecido el material que han visto y las actividades que han realizado.
También se les puede pedir una pequeña redacción sobre lo que han aprendido y visto.
Personalmente prefiero la asamblea, ya que es más ameno y divertido para los niños.
 
¿CÓMO LO HE HECHO?
- He asistido a una pequeña exposición sobre material escolar y didáctico de la época de la república y la época de Franco.
- He ido tomando pequeños apuntes de lo que nos iba exponiendo Jesús Asensi.
- También he ido tomando fotografías del material que nos iba enseñando y pasando.
- He añadido una nueva entrada al blog y he redactado la exposición con lo más importante y lo que más me ha llamado la atención y he añadido algunas de las fotografías que tomé.
- Añado las etiquetas museo_virtual_13_14 y museo_pedagógico y subo la entrada. 
 
REFLEXIÓN
Me gustó mucho asistir a la exposición ya que había libros antiquísimos y el contenido de ellos es totalmente distinto al que ves hoy en día en los libros de texto.
Además me ha llamado la atención que las materias no estuvieran en diferentes libros, sino que se concentraran todas en un mismo libro.
También me ha encantado poder escribir con tinta y pluma, ya que es la primera vez que lo hacía. He podido comprobar que no es tan fácil como parece, puesto que la tinta que se queda en la pluma es difícil que vaya cayendo poco a poco en la hoja y es difícil poder escribir de una forma homogénea. 

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